La historia de la electricidad no existe como tal ya que la electricidad es un fenómeno de la naturaleza y por lo tanto existe desde el origen de nuestro mundo, siendo más precisos deberíamos hablar de la historia de la observación de la electricidad.
Hasta hace poco más de 300 años poca importancia se le daba a un fenómeno que aunque inexplicable parecía trivial: la atracción de que ciertos cuerpos ejercían sobre objetos ligeros después de ser frotados enérgicamente con un paño de seda o lana.
Tabla de contenido
Cronología de la historia de la electricidad
La electricidad en la antigüedad
Parece ser que Tales de Mileto había ya observado el fenómeno hace más de 2000 años, pero en épocas posteriores el tema cayó en olvido o bien se le prestó un mínimo de atención ¿Es que acaso podía deducirse alguna ventaja de esas pequeñas y ligeras atracciones? ¿Es que el problema merecía la atención y el trabajo de científicos dedicados a empresas más amplias y trascendentes?.
Después de muchos siglos de indiferencia total el problema fue replanteado por Gilbert. Fue él quien designó con la palabra “eléctrica” a la atracción producida por el vidrio o el ámbar sobre pequeños objetos.
Primeros estudios sobre la electricidad
Algunos científicos se dedicaron a realizar sencillas pruebas con cuerpos eléctricos y entre ellos estaba Stephen Gray, quien en 1729 descubrió la posibilidad de transferir la electricidad a través de varios cuerpos en contacto. Algunos años más tarde Desaguliers llamó “conductor” a todo cuerpo capaz de conducir fluido eléctrico.
Casi al mismo tiempo se percató Charles Du Fay de que todos los objetos podían electrizarse por frotamiento y distinguió dos tipos distintos de electricidad: la que él denominó vítrea por ser característica del cristal, piedras preciosas, etc., y la resinosa propia del ámbar, seda o papel.
Modelo de Edison lámpara incandescente eléctrica, con filamento carbonizado de bambú. La bombilla eléctrica suplantó la iluminación a gas en las casas y comercios.
Cómo se producía la electricidad?
Inmediatamente comenzó la construcción de aparatos destinados a producir la ya famosa electricidad. Se trataba de bolas de vidrio que al ser sometidas a una rápida rotación o a frotación enérgica con la mano eran capaces de emitir chispas eléctricas. Los primeros aparatos eran aún muy rudimentarios pero el grueso de la población seguía con interés la evolución del proceso. Uno de los acontecimientos más singulares en la historia de la electricidad tuvo lugar en 1745 en la localidad holandesa de Leyden.
Mientras Musschenbroek trataba de electrizar el agua contenida en una botella de vidrio, uno de sus ayudantes que sostenía la botella con una mano, tocó simultáneamente con la otra el conductor cargado, recibiendo por ello una fuerte sacudida en el pecho y en las manos. La botella de Leyden fue la curiosidad científica de toda Europa. Todos querían experimentar por sí mismos los extraños efectos de aquel descubrimiento.
Benjamin Franklin
El interés llegó a América donde un hombre llamado Benjamín Franklin (1706-1790) se dedicó a realizar una serie de pruebas con la famosa botella de Leyden. Los trabajos del sabio americano aclararon en parte las ideas sobre el inexplicable fenómeno, pues consideró a la electricidad como un fluido presente en el interior de todo cuerpo en una proporción determinada. Sólo la existencia de un exceso o un defecto de dicho fluido podía originar propiedades características fácilmente observables. ¿Cómo era ese fluido? ¿Existía alguna relación entre él y la materia? ¿Tenía naturaleza corpuscular u ondulatoria?
Las respuestas continuaban siendo mínimas. Sólo se había adquirido la convicción firme de que la materia contenía en su interior una fuerza que el hombre no había nunca imaginado.
Benjamin Franklin, escritor, inventor, científico...
Benjamin Franklin, era escritor, inventor, científico, diplomático, impresor y editor; hizo varias contribuciones a la ciencia, sobre todo en el terreno de la electricidad. Fue el primero en demostrar que los rayos eran en realidad electricidad a traves de un famoso experimento en el que hizo volar una cometa en una tormenta.
Charles Coulomb
Los fenómenos de atracción entre dos cuerpos electrizados parecían depender explícitamente de la distancia que mediaba entre ellos. Él francés Charles Coulomb (1736-1806) pudo comprobar mediante una sensible balanza de torsión que las fuerzas de atracción y repulsión cumplían una ley análoga a la gravitacional propuesta por Newton.
Fue el primer intento de expresar cuantitativamente la electricidad, pero ello no ampliaba nada sobre su naturaleza, que continuaba siendo un profundo secreto.
Luigi Galvani
En 1786 se realizó una experiencia trascendental y en parte fortuita el anatomista italiano Luigi Galvani (1737-1798) estaba realizando en Bolonia unos estudios sobre electricidad animal cuando comprobó que las ancas de rana colgadas de un gancho de cobre sufrían una violenta convulsión si incidentalmente se ponían en contacto con otro metal tal como el hierro.
Galvani dedujo con ello la existencia de electricidad animal en todo organismo vivo, pero su compatriota Alessandro Volta (1745-1827) repitió las mismas experiencias asegurando que el contacto entre los metales era la verdadera causa engendradora de la electricidad.
La pila de Volta
En su carta del 20 de marzo de 1800 dirigida al presidente de la Royal Society de Londres señaló el descubrimiento de un “órgano eléctrico artificial” capaz de los efectos más sorprendentes. Este órgano artificial consistía simplemente en una pila o sucesión de discos en el siguiente orden: cobre/ cinc/ cartón empapado en agua salada/ cobre/ cinc.
Había nacido la primera “pila” de la historia. Una pila basada en un fenómeno desconocido cuyas manifestaciones externas permitían sin embargo un gran número de aplicaciones no sólo científicas, sino también técnicas.
La construcción de la pila es un mojón muy importante en la historia de la electricidad ya que lograría revolucionar el concepto tradicional de la química al hacer posible la electrolisis del agua y otras sales fundidas. Una pila que significaría el comienzo de una de las disciplinas que más profundamente iba a transformar el futuro científico y técnico del mundo.
Jenatzy – Francia 1899, coche eléctrico de notable precisión mecánica y lineas futuristas, neumáticos macizos de goma. Una vez lanzado alcanzaba los 100 km/h.
Michael Faraday
Muchos cientificos trabajaron en la comprensión de la naturaleza de la electricidad y sus propiedades en la ultima parte del siglo XVIII; pero fue Michael Faraday quien descubrió las propiedades más importantes de la electricidad.
Farday llevo a cabo algunos estudios sobre la naturaleza de la electricidad y en la década de 1820 construyó el primer motor eléctrico, un aparato que transformaba la energía eléctrica en energía mecánica utilizando la interacción de la corriente eléctrica y el magnetismo. Continuando con sus estudios descubrió el fenómeno de la inducción electromagnética, o la producción de corriente eléctrica a partir del cambio de un campo magnético; esto lo llevo a construir el primer dinamo en 1831, un aparato que transformaba la energía mecánica en energía eléctrica.
Energía eléctrica
La electricidad tranformó la vida como pocas tecnologías lo habían hecho a lo largo de la historia. Antes de acabar el siglo XIX se hizo realidad la existencia de luz eléctrica económica, los tranvías y el uso de la energía eléctrica en la industria.
Más información:
Recomendamos recorrer toda la cronología interactiva de la historia de la electricidad que hemos realizado ya que hay mucha más información y datos contenidas en ella. Además tiene videos muy interesantes que seguro les van a gustar.
https://es.wikipedia.org/wiki/Electricidad
Historia de los Inventos Desde la Antiguedad Hasta Nuestros Días – Fullmann
Muy interesante la historia de la electricidad que habéis escrito. Ha participado mucha gente muy inteligente y ha podido avanzar mucho a los humanos. Os dejo una infografía que lo resume muy bien: https://www.electricidad.total.es/luz-electricidad-historia-tesla-edison